El tiempo es una moneda de cambio que todos tenemos y que tiene un efecto amplificador. Ya que el tiempo pasa por todos nosotros, es una moneda que podemos intercambiar por aquello en lo cual decidamos ya sea gastarla o invertirla. Estudiar una carrera, leer un libro o aprender a tocar un instrumento, requieren que.
Quien tiene su mente fija en gastar lo que gana vive preponderantemente en el hoy. Quien ademas de gastar, ahorra un poco de lo que gana para terminar gastándolo en algo para lo que no le alcanza hoy, vive el hoy y un poco el mañana. Pero quien ademas de gastar y ahorrar, invierte una.
Te has hecho la pregunta: ¿Para qué trabajo?. Hoy despertaste en tu cama. ¡Bendito seas! Ya de entrada vamos de gane. Te levantas de la cama y vas al baño. Entre pestañeo y pestañeo, la luz que atraviesa tus ojos empieza a tomar mayor intensidad hasta que ya te das cuenta que es un nuevo.
Si a ti, como a mucha gente, el tema de libertad financiera es relevante, probablemente hayas escuchado en algún programa, o leído en libros o artículos que todos tenemos la capacidad de lograrla. Claro, siempre que tengamos una fuente que nos genere ingresos. Ése es el punto de partida. Libertad financiera se puede definir como.
¿Te has puesto a pensar en tu retiro? No recuerdo dónde escuché por primera vez la expresión de: “Viviré de mis padres hasta que me mantengan mis hijos”. Changos! ¿Qué onda con eso? Parece de risa, pero ayer que terminé de ver el primer capítulo de la serie de Luis Miguel que está pasando Netflix.
¿Te da miedo invertir en la bolsa de valores? El temor, primo hermano del miedo, es una emoción humana. Nadie puede escapar de ella. Todos en algún momento podemos ser embargados por dicha emoción. De acuerdo a la Real Academia de la Lengua el temor es: “Pasión del ánimo, que hace huir o rehusar aquello.
En este artículo vamos a platicar de gastar o invertir y sus beneficos. Tengo un conocido que es profesor de filosofía, quien en una ocasión en la que se discutía de manera acalorada sobre el concepto del libre albedrío, sus interlocutores no alcanzaban a comprender la postura que manifestaba. Él exponía que – ¡El mal.
Porque la cooperación entre dos personas o más, suma esfuerzos para lograr mayores fines que aquellos que se emprenden de manera aislada. Te platico una historia…
